El anhelo de la mente es ser extraordinaria. El ego tiene hambre y sed de reconocimiento. Algunos alcanzan ese sueño a través de las riquezas, otros a través del poder, de la política; otros realizan el sueño por medio de milagros, «No puede soportar no ser nadie». Y eso es un milagro; cuando aceptas que no eres nadie, cuando eres tan ordinario como todo lo que te rodea, cuando no pides reconocimiento, cuando puedes existir como si no existieras. El milagro es estar ausente.
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2 comentarios:
Gracias y les deseo lo mejor con su banda...no aflojen y persigan su SUEÑO...
la fortaleza no se mide, en cuanto puedes resistir las "tempestades" de la vida, la fortaleza es no resitencia.
bueno amix seguire chekeando tu blog, jajjajjaa
fana
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